Israel Galván y el Niño de Elche revolucionan el flamenco con su espectáculo ‘Mellizo Doble’

Israel Galván y el Niño de Elche revolucionan el flamenco con su espectáculo ‘Mellizo Doble’

Tras el gran éxito que obtuvo en 2019 en su estreno en Japón, ahora estos dos artistas traen el montaje a su país de origen. Del 29 de abril al 1 de mayo, el Centro de Cultura Contemporánea Condeduque acoge una propuesta clásica y moderna a la vez que invoca la tradición y la innovación. 

Así, con motivo del Día Internacional de la Danza, el centro cultural presenta este jueves ‘Mellizo Doble’, un increíble diálogo en el que ambos autores explotan los modelos ancestrales del flamenco. Galván desde su cuerpo. Niño desde la voz. Un espectáculo que hace añicos el imaginario flamenco, recoge los trozos y los recompone desde una sensibilidad única.

Se trata de una manera nueva de entender el flamenco, de bailarlo y cantarlo, que ellos mismos llaman tradicional porque sienten que se gesta en la traición a la tradición. Para ello es necesario, como espectador, viajar por el borde de un precipicio por el que los puristas tienen mayor propensión a despeñarse.

‘Mellizo Doble’ es el resultado de una fusión explosiva entre el cante transgresor y el baile sin ataduras, en el que estos dos renovadores del arte comparten su locura en el escenario tras su trayectoria en solitario, marcada por la vanguardia, las incursiones en la performance y las coplas mecánicas.

“Teníamos muchas ganas de volver a trabajar juntos”, cuenta Israel Galván, “y decidimos poner en marcha ‘Mellizo Doble’. Lo estrenamos en Japón y fue un auténtico éxito. Después teníamos previsto ir al Festival de Aviñón, pero se suspendió por las restricciones del covid-19, y al final logramos presentarlo en octubre”.

Ambos han estado siempre conectados. Tres años antes de que estrenaran esta función conjunta, el bailaor ya había invitado al Niño de Elche para que interviniese en su espectáculo ‘La Fiesta’, y más tarde el cantaor contó con Galván para promocionar su disco ‘Antología del cante flamenco heterodoxo’. 

Poco más tarde un festival, en apariencia, tan alejado a su mundo como el Sónar, volvía a reunirles en Barcelona en ‘Las coplas mecánicas’, una performance de infarto en la que mezclaban el flamenco y la música electrónica.

En ‘Mellizo Doble’, una exhibición sin escenografías ni vestuario, el cante, el fandango, las seguiriyas y la danza contemporánea se apoderan de las tablas para descubrir nuevos caminos dentro del flamenco. Por otra parte, el 30 de abril se ha organizado un encuentro con el público al finalizar la función que, seguro, no dejará indiferente a nadie.